Una tostaduría descuidada puede presentar riesgos enormes para la salud y la seguridad  de los miembros del personal laboral, así como provocar daños físicos y pérdidas económicas. Sabemos que en muchos casos, realizar la limpieza y el mantenimiento de una tostaduría es una tarea difícil, hay muchas piezas pesadas, grandes y difíciles de alcanzar, desde la tostadora hasta las tuberías y la despedregadora. Periodistas realizaron entrevistas a expertos, obtuvieron y comparten consejos muy útiles.

El primer consejo que comparten Nicholas Flatoff y Brice Sturmer, técnicos de Usonian Systems, es que se inicie por la tostadora y luego a los otros equipos. Brice dice que “el mejor punto de partida es consultar el manual del fabricante” ya que ninguna tostadora es igual, cada persona conoce su máquina y dependiendo de las horas en las que se encuentre en funcionamiento, es la planificación y organización de mantenimiento.

El recolector de cascarillas se debe tratar de limpiar de cada 3 a 5 tuestes. Si se realizan tuestes oscuros se debe realizar con mayor frecuencia si se está acumulando aceite y bloqueando el flujo de aire, que es una regla general para el mantenimiento de la tostadora. Es necesario limpiar la bandeja de enfriamiento todos los días o más seguido si es posible. Una vez por semana, deberías controlar la ventilación y los cojinetes.

Todos los días se debe barrer y eliminar el polvo para disminuir riesgos y cumplir con las normas de seguridad e higiene alimentaria. Por último, si algo en las máquinas no es normal, se debe tomar un momento para controlar que sucede, y/o llamar a un experto.