Uno de los grandes errores que cometen las personas con el lavado de sus utensilios para preparar el café, es utilizan jabón para platos (trastes) y hasta cloro entre otros productos. Usar jabón no es una buena idea y tampoco lo es utilizar paños o esponjas para fregar, ya que de esta manera las paredes de la cafetera estarían perdiendo todas las cualidades organolépticas que ha ido adquiriendo a lo largo del tiempo, cambiando el aroma o sabor original del café.

Lo más recomendables es utilizar agua caliente o tibia para lavar los utensilios que usamos para preparar el café incluyendo la cafetera, jarras o teteras.

El café es una bebida con propiedades y cualidades propiedades y cualidades organolépticas, que son cualidades sensoriales que podemos apreciar en los granos del café y en la taza de un café preparado al observarlo, al olerlo y al probarlo, y se refiere a la acidez, al amargor, al cuerpo, al sabor y al dulzor que podríamos percibir con una buena taza de esta maravillosa bebida.

Lavarla únicamente con agua es una de las mejores recomendaciones que se puede tomar para no desaprovechar los aromas y los sabores que aporta el café.