Este podría ser un año histórico para la caficultura colombiana, durante el segundo semestre se espera una buena cosecha. Sin embargo, según periodistas, la cosecha de este segundo semestre dependerá de la evolución  de la pandemia y reactivación del transporte intermunicipal, para la movilización de la mano de obra que se transporta desde diferentes regiones hacia los cultivos.

Cientos de recolectores se trasladan a fincas cafetaleras al año, datos de la Federación Nacional de Cafeteros – FNC – indican que la mayor producción de café se da en octubre, en la zona norte en septiembre y en la zona sur el pico será en noviembre.

“Las limitaciones de movilidad, así como las clasificaciones de zonas con alto, medio y bajo riesgo de covid-19 podrían afectar la llegada de los recolectores, a lo que se le suma que las restricciones son heterogéneas, dependiendo de cada entidad gubernamental”, indicó Hernando Duque, gerente técnico de la FNC.